En esta entrada me voy a ocupar de los yogures de soja en sus diversas presentaciones. Para ello he preparado una comparativa de 14 productos cuyo resultado se muestra en esta tabla:
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| Aditivos presentes en los yogures de soja |
El único aditivo desaconsejable, que aparece de manera recurrente en casi todas las marcas, es el E-341, fosfatos de calcio, del que ya he hablado en otras ocasiones. En dosis equilibradas no presenta efectos secundarios, pero en caso de consumo habitual puede provocar una disminución de la absorción del calcio, desequilibrando la relación calcio/fósforo en el organismo. El problema principal es que la presencia de los fosfatos es muy habitual en los alimentos, incluso de forma natural.
Los únicos que no añaden el E-341 son los de frutas del bosque y melocotón de Soywell, una marca blanca del Lidl. El resto (incluso la variedad natural de esta misma marca) sí contienen los fosfatos de calcio.
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| Este producto del Lidl es el más recomendable ya que no contiene fosfatos de calcio ni colorantes |
Curiosamente, en el extremo de la tabla se sitúa la marca más conocida de yogures de soja, Savia de Danone. Y ocupa esa posición tan baja por añadir edulcorantes como acesulfamo potásico, E-950, y sucralosa, E-955. Del primero no existen evidencias de efectos adversos, pero está en amarillo porque hay expertos que advierten que sería necesario realizar más estudios ya que los actuales están en su mayoría financiados por la propia industria y, como sabemos, no van a sufragar ninguna investigación que pueda arrojar resultados que perjudiquen su negocio. Con respecto a la sucralosa, estudios en ratas evidenciaron efectos negativos sobre la flora intestinal, aunque estudios posteriores descartaron dichos efectos en humanos dentro de los niveles de consumo aconsejados. Como existen otros edulcorantes que no cuentan con problemas, ni siquiera en las ratas, creo conveniente evitar el consumo del E-955 siempre que sea posible.
A propósito de esto, quiero aprovechar la ocasión para quejarme de lo difícil que es a veces encontrar un yogur sin azúcar y sin edulcorantes. En los yogures normales no, pero en los desnatados con fruta, por ejemplo, es tarea imposible. En estos de soja ocurre lo mismo: todos contienen azúcar, excepto savia que lleva edulcorantes. ¿Es que a ningún fabricante se le pasa por la cabeza la posibilidad de que el consumidor quiera decidir si se toma el yogur de soja con azúcar, fructosa, miel, azúcar morena, stevia o lo que le dé la gana añadirle…? ¿Por qué no dejan esta decisión en manos del consumidor?
Y, por último, un detalle más. Todas las marcas, excepto Danone, Carrefour y Milsani (Aldi) especifican que la soja que utilizan no está modificada genéticamente. Esto no significa que la de estas marcas sí sea transgénica, pero es un dato más a tener en cuenta.
En definitiva, el más recomendable es el Sojagurt de frutas silvestres de Soywell (Lidl) y, en segundo lugar, el de melocotón, pero me gusta menos porque le añaden dos colorantes que no le hacen ninguna falta.