Esta semana voy a referirme a un asunto sobre el que me preguntaron hace unos días en los comentarios de otra entrada: la fluoración del agua. Es decir, utilizar el flúor como aditivo añadido en el agua corriente.
En realidad es fluoruro lo que se añade ya que el flúor en estado puro, a temperatura ambiente, es un gas tremendamente peligroso. Desde la década de los años 40 del siglo XX se viene utilizando el fluoruro para la prevención de las caries y para fortalecer el esmalte del diente durante su periodo de formación, o sea, en los niños.
Autor: Peter Gibson |
Por eso, aunque el fluoruro ya está presente en la naturaleza, las autoridades sanitarias permiten que se añada en los productos de higiene dental, e incluso los dentistas de vez en cuando aplican a los niños un tratamiento específico de fluoración en los dientes. También es fácil encontrar sal fluorada para cocinar. Pero, lo que quizás muchas personas no saben es que también se añade de manera indiscriminada al agua potable.
Digo «de manera indiscriminada» porque se hace sin consentimiento ni conocimiento expreso de la ciudadanía. Al usar un dentífrico u otro o al elegir una sal u otra, puedes elegir si tomas un producto con flúor o sin él, pero cuando se la añaden al agua del grifo que llega a tu casa, estás tomando este aditivo sí o sí.
Pero, si es bueno para los dientes… ¿qué problema hay?
Protestas contra la fluoración / Autor: Ben Kraal |
«No hay ninguna ventaja evidente en favor de la fluorización del agua en comparación con la aplicación tópica, es decir, a través de pasta dentífrica, enjuagues bucales o gel. El efecto [positivo] de una exposición continuada al fluoruro proveniente de cualquier fuente es cuestionable una vez que los dientes permanentes han aparecido».
Yo recuerdo que en el colegio, cuando era pequeña, nos hacian todas las tardes hacer gargaras con fluor, de color rosa radiactivo, y las cosas estaban como para negarse a hacerlo…ademas de que no se informaba a los padres y nosotros eramos muy pequeños para ser conscientes de lo que nos daban…
Si es que estamos vivos de milagro…
Saludos, Sara.
Muchas gracias por tu blog, lo he descubierto hoy y llevo horas leyendo, debería saberlo todo el mundo
Gracias a ti por descubrirlo y por leerlo.
¡Bienvenida!
Saludos.
La unica alternativa que hay es sustituir las pastas de dientes con fluor por las de xylitol. y que no tengan triclosan, parabenos ni alcohol en su composicion.
Gracias por tu comentario.
Saludos.
Nos envenenan como a las ratas… y nos venden las pastas de dientes con fluor como algo «saludable». Nos manejan como quieren.
Al hilo de las propuestas…el azucar (refinada o no) es un aditivo?
Aqui un link a la conferencia de Rafael Román Molina:
https://www.youtube.com/watch?v=coHYt4AByyI#t=
http://vimeo.com/42752785
Hola Nieves.
Apunto lo del azúcar para más adelante.
Gracias por tu comentario.
Saludos.
Pues que «suerte» que tenemos en Palma que el agua que sale por el grifo sabe tan mal (y normalmente apesta a químicos…) que nos vemos obligados a comprarla embotellada…
Verónica